Netflix ha anunciado una emisión de deuda por valor de 2.000 millones de dólares (1.783 millones de euros) sin determinar el interés ni el vencimiento. Lo que sí ha confirmado es que hará dos series: una en dólares y otra en euros. La empresa acude por séptima vez en cuatro años a los mercados de renta fija en busca de financiación para hacer más contenido audiovisual. Sus acciones reaccionan con caídas en Wall Street, aunque en el año todavía suben más de un 40%.
Netflix «planea usar los ingresos netos de esta oferta para propósitos corporativos generales, que pueden incluir adquisiciones, producción y desarrollo, gasto de capital, inversiones y transacciones estratégicas», ha explicado la empresa creadora de Stranger Things o House of Cards.
A cierre del primer trimestre de 2019, la deuda a largo plazo total de Netflix se situó en 10.305 millones de dólares (9.192 millones de euros), un 57,5% más que en el mismo periodo del ejercicio precedente y casi el triple que la cifra contabilizada durante los tres primeros meses de 2017.
Además, aunque entre enero y marzo de este año Netflix contabilizó un beneficio neto de 344 millones de dólares (306,8 millones de euros), el flujo de caja se situó en un negativo de 459 millones de dólares (409,4 millones de euros). En el conjunto de 2018, el flujo de caja de Netflix se situó en un agujero de más de 3.000 millones de dólares (2.676 millones de euros).