“Según estudio, la bacteria ‘P.cichorii’ posee propiedades que neutralizan evolución de infecciones.”
Las bacterias que anidan en la piel de ranas y anfibios mermados en todo el mundo por una enfermedad letal han hecho que otros batracios resistan la epidemia y podrían ayudar a combatir infecciones por hongos en seres humanos, indicaron fuentes científicas que han seguido de cerca este fenómeno.
Científicos del Instituto de
Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología -Indicasat AIP- y
del Instituto Smithsoniano de Investigaciones Tropicales -STRI- de Panamá han
explorado los compuestos de estas bacterias como posibles nuevas fuentes
antifúngicas para beneficio de los seres humanos y anfibios.
El equipo viajó por primera vez a las tierras altas de la provincia occidental
de Chiriquí, en Panamá, donde el hongo quítrido, responsable de la enfermedad
quitridiomicosis, ha afectado gravemente a las poblaciones de anfibios, según
un comunicado del STRI que relató la travesía y los resultados obtenidos.
Recolectaron muestras de siete especies de ranas para averiguar qué tipo de
bacterias de la piel albergaban, recuperando 201 cepas bacterianas que fueron
probadas contra el Aspergillus fumigatus, un hongo que causa
aspergilosis invasiva en pacientes inmunocomprometidos.
De estos, 29 mostraron actividad antifúngica pero se puso atención en una
bacteria llamada Pseudomonas cichorii, que mostró el mayor potencial
para inhibir el crecimiento de la infección.
Los científicos identificaron las bacterias más ‘prometedoras’ para saber cuál
de todos los compuestos químicos producidos por
la P.cichorii neutralizaban el efecto de los hongos, y descubrieron
que los principales eran lipopéptidos cíclicos que incluían massetolides y
viscosina.
Se separó la viscosina de los otros componentes producidos por la P.cichorii y
se probó in vitro contra la bacteria infecciosa y el hongo quítrido. Los
resultados confirmaron que la viscosina mostró una actividad significativa
contra ambos.
«Estamos mostrando a la
comunidad científica un conjunto de posibles moléculas alternativas para
combatir la resistencia a los medicamentos fúngicos en los humanos», dijo
Christian Martin, autor principal del estudio junto con el investigador
principal Marcelino Gutiérrez, ambos de Indicasat.
Roberto
Ibáñez, uno de los autores del estudio publicado en Scientific Reports, indicó
que: «como resultado de la evolución, se espera que los anfibios
posean compuestos químicos que puedan inhibir el crecimiento de bacterias y
hongos patógenos».
Ibáñez señaló que los anfibios tienen glándulas dispersas en su piel que
producen diferentes compuestos y su piel está habitada por una comunidad
diversa de bacterias que producen metabolitos que inhiben el crecimiento de
hongos y otras bacterias.
«Esta investigación ha identificado un compuesto antifúngico producido por
la bacteria de la piel de rana, que se puede usar para controlar los
hongos patógenos que afectan a los humanos y los anfibios. Se requerirá más
investigación para determinar su uso medicinal potencial», destacó Ibáñez.
Para el Instituto Smithsoniano de Investigaciones Tropicales, este
proyecto de investigación es prometedor tanto para los humanos como para las
ranas.
Se puso atención en una bacteria llamada Pseudomonas cichorii, que mostró el mayor potencial para inhibir el crecimiento de la infección
«El estudio de las bacterias de la piel de las ranas panameñas puede conducir al desarrollo de fármacos alternativos para tratar los hongos que causan la aspergilosis en los humanos, que son cada vez más resistentes a los medicamentos y desafían la epidemia de quitridiomicosis, la principal fuente de muertes relacionadas con enfermedades en los anfibios de todo el mundo», resaltó el STRI.TOMADO DE: https://www.eltiempo.com/vida/ciencia/bacteria-en-piel-de-las-ranas-podria-neutralizar-infecciones-en-humanos-338498